Además de las revisiones, ha tenido que ir otras dos veces para reparar cosas. Hasta ahí bien.
Pues resulta que esta tarde lo he llevado a Toyota Kobe, en Villalba, para una revisión pre-ITV para asegurarme el buen estado de todo antes de la carrera de mañana. Me he quedado acojonado de la cantidad de cosas que han salido:
- el disco derecho de freno del eje delantero, doblado, hay que cambiar ese disco, y claro, el del otro lado, y las pastillas, que no tenían ni 10.000 km
- la zapata derecha del freno de mano (trasera), gastada, y que también hay que cambiarla
- pierde aceite por retén de salida del cigüeñal
- no solo hay que cambiar los amortiguadores (cosa que ya sabía), sino las rótulas delanteras y traseras (dirección y suspensión)
Solo recuerdo que en Llorente me mencionasen lo del freno de mano, pero no le di importancia, ya que para driftear no lo necesito. El resto me ha pillado de sorpresa. Ya me había quejado de que los frenos iban mal, pero con cambiarme las pastillas delanteras lo dieron por cerrado. Al final pensé que el coche "es así". Total, que estoy por ponerle una reclamación a Llorente del carajo, precisamente les pedí que sacasen todas las mariconadas que hubiese y así poder subsanarlas.
Por cierto, la atención que me han dado en Kobe, acojonante, la próxima vez les llevo el coche a ellos, que están mucho más cerca, y donde el mecánico (16 años exp) no parece que se le escape nada.
Ya me he quedado a gusto, ¡ea!
